El Portal Peruano de Arquitectura
 
     

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por el Arq. José Beingolea del Carpio


PARTE 1: Los pioneros (desde el siglo XIX, hasta 1910)


En 1853 se crea la Comisión Central de Ingenieros. En 1860, el Cuerpo de Ingenieros y Arquitectos del Estado. Ante la ausencia de estos profesionales y a la necesidad de establecer una política local, se le autoriza para acreditar a Ayudantes de Ingenieros y Ayudantes de Arquitectos, con tres y dos clases, respectivamente. Luego de cumplir determinados requisitos podían acceder al título de Ingeniero o de Arquitecto Civil.

En 1872 al crearse la Junta Central de Ingenieros, cuyos objetivos serían los de proyectar, ejecutar y vigilar las obras públicas(1), se divide en cinco secciones, una de ellas fue la de Edificios públicos y de Arquitectura.

La Escuela de Ingenieros se crea en 1876 con las secciones de Construcciones Civiles y Minas, en aquella se imparten cursos de Arquitectura para obtener la mención Ingeniero-Arquitecto.

El profesional Ingeniero o Arquitecto forma parte activa del proceso de sustitución de la tradición local por los modelos y técnicas creados por la revolución industrial como parte del proceso de universalización del mercado capitalista.

El profesional es principalmente funcionario público (Arquitecto o Ingeniero de Estado), pero también está al servicio de los Contratistas (vg Henry Meiggs), los primeros empresarios ligados a la industria de la construcción, al sector inmobiliario y a la construcción de la infraestructura en el territorio (ferrocarriles, puentes, puertos) y en la urbe (edificaciones e infraestructura de servicios).

En este periodo, los primeros profesionales fueron principalmente extranjeros y había entre ellos la clara distinción entre Ingenieros y Arquitectos. Los profesionales que empiezan a egresar de la Escuela desde 1880, en plena guerra, pondrán en evidencia la ambigüedad de las competencias entre el Ingeniero y el Arquitecto. El campo de intersección entre ambas competencias era la construcción debido a que el modelo francés adoptado por la Escuela se alineó a la tradición constructiva de las Escuelas de Puentes y Caminos y los Politécnicos, antes que a la de la Escuela tipo Beaux Arts.

Sobre el reconocimiento social puede mencionarse que el nivel de sus remuneraciones estaba muy por debajo de la de los carpinteros y empresarios madereros(2). El nivel de ingreso del arquitecto al ser la mitad del ingeniero, prueba la clara distinción de competencias, su reconocimiento y valoración.


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(1) Jorge Vidal “Felipe Arancivia Bercolme (1840-1915) un Ingeniero al servicio del Estado, en “Construyendo el Perú II. Aportes de ingenieros y arquitectos” UNI-Proyecto Historia UNI, Universidad Nacional de Ingeniería, Lima 2001 p. 197.

(2) ....en 1876, los carpinteros mantenían su rango en la escala socio económica de ingresos, con un promedio de 150, a la par de los joyeros y prestamistas, e incluso con muchos mayores ingresos que Ingenieros (80) y Arquitectos (40), que aparecen en las estadísticas de dicha fecha. Por encima de ellos aparecen sin embargo los almaceneros de madera, esto es, los importadores de madera que tenían ingresos promedio fluctuantes entre 180 y 1000. José Beingolea Del Carpio, en “Histroria de la construcción en el Perú”, texto inédito Cámara Peruana de la Construcción (CAPECO), Lima, 1994.


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