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El Paseo Colón, 1920
Transitanto por el Paseo de Ayer y de Hoy

Todos somos hijos de nuestro tiempo pues las "Torres de marfil" alejadas del mundanal ruido simplemente no existen. Cada época impone su cultura, sea propia o alienada, y modela opiniones, conductas, propuestas. El Perú, como cualquier otro país, nunca fue ajeno a estas premisas. Es por tanto importante caminar por el pasado para luego entender y comprender el origen, la función y actividades que se suscitaron posteriormente en uno de los Paseos mas coloquiales que Lima a heredado de inicios de la República. Entonces empecemos mirando a través del paisaje y los eventos que se nos narra en las páginas de cierta revista que circulaba en 1925 por las calles de Lima:

La población conquistadora que se estableció en Lima era de origen estremeño y andaluz y, como tal amiga de la diversión y del placer. Desde el día primero de fundada la ciudad, se crearon en Lima centros de esparcimiento y diversión. Lima, la tierra sedienta les ofrecía "Las Lomas de los Amancaes", la cual se poblaba de bellas flores amarillentas y, a su lado crecía también, la destacada flor de San Juan. Así que fue necesario limpiar y arreglar el camino; que dió paso al surgimiento de algunas pequeñas industrias que daban vida a las fiestas; tanto como conservaban allí su imperio las llamadas "vivanderas" con sus ardientes viandas criollas y sus fermentadas chichas. Allí triunfaron los profesores de bailes nacionales con su sensual samacueca y sus adaptaciones de las danzas europeas.

El Paseo de Amancaes comenzaba en Sanjuán y se prolongaba todo el invierno. Al romperse la bruma, se iniciaban los cánticos y el baile los acompañaba. El cajón, la guitarra encintada, los coros musicales prestaban su animación y su gracia. Y las lomas amarillentas hormigueaban de gente que se esparcía alegre. Y en el camino culebreaba el gentío a pié, a caballo, en los balancines y en las calesas armoriadas. El virrey y su corte eran siempre de la fiesta y, al llegar la República, lo fueron Presidentes y palatinos.

Al declinar la boga de Amancaes surge en 1611 el paseo de los Descalzos, convirtiéndose en el paseo aristocrático y en 1856 convirtiéndose en el Paseo contemporáneo.

La moda tornadiza llevo a las gentes de la ciudad a la Alameda de Acho que en 1773 fue arreglada como paseo. Adquiriendo especial importancia los días domingos. Allí se colocó mas tarde la estatua de Colón (obra de Salvatore Revelli). Posteriormente siguieron en boga; la Alameda del Callao, creada en 1797 por el Virrey Marques de Osorno. Su intenso tráfico lo destruyó y hoy no existe ya, como paseo.

El virrey Amat quiso establecer un nuevo paseo que reprodujese a los de la Granja y de Aranjuez, que a su vez copiaban los de Versalles, naciendo así el Paseo de las Aguas; frente a la casa de su amada Perricholi. El Paseo quedo inconcluso.

A estos antiguos Paseos plácidos, reemplazaron nuevos paseos atrayentes, que la actividad contemporánea y el automovilismo arranca de la ciudad.

Párrafo de Clovis "Ciudad y Campo"1925


A estos nuevos paseos pertenece El Paseo Colón, pero para no perdernos sigamos con la historia.

Hacia 1870 la imagen de Lima se encontraba de espaldas al resto del país, nuestra ciudad se encontraba circundada, desde el año 1685, por unas murallas que marcaban no sólo sus límites, sino también su fisonomía de reducto espiritual de élite. Pero, como toda ciudad, Lima no pudo substraerse al mandato de las mutaciones y, es en 1870, cuando presidía el país José Balta, el ingeniero Henry Meiggs obtuvo el permiso para que los viejos muros fueran derruidos. Era el comienzo de la transformación. Raúl Porras Barrenechea, en su artículo "Perspectiva y panorama de Lima", describe ese primer intento de ingresar en la modernidad:

[La ciudad] se extendió entonces prodigiosamente, reemplazando los antiguos muros por anchas avenidas de circunvalación. A la visión certera y previsora de Meiggs se unieron, para transformar a Lima, el espíritu artístico y la infatigable actividad de Manuel Atanasio Fuentes, a cuyo gusto y bajo cuya inspiración se alzaron los planos del palacio de la Exposición de 1872 y de los jardines que lo rodean, dentro de los cuales se hallaban los actuales Parque Zoológico y Parque Neptuno.


Fue en 1869 donde el Presidente Balta emitió un decreto con el fin de organizar para 1872 una gran exposición de productos naturales, agrícolas y manufacturados. Al periodista Manuel Atanasio Fuentes Y al arquitecto italiano Antonio Leonardi se les encomendó la organización técnica de la construcción y la supervisión estuvo a cargo de Manuel Ignacio de Vivanco. Fue celebrado un concurso de modelos de maquinas, plantas y animales extranjeros. Se trataba de exhibir los progresos del país y de atraer a los inversionistas extranjeros. Así se construyeron varios parques, un "palacio", pabellones y glorietas. En definitiva, un nuevo y moderno espacio público.

La "Exposición" como se la llamo coloquialmente a este sector de la ciudad abarcaba un área muy grande. Según Jorge Basadre, alcanzaba los 192,000 metros cuadrados El palacio se localizo al centro de un conjunto de parques. La ciudad de Lima empezaba su transformación urbana y apostaba por la modernidad. Sin embargo estos esfuerzos se detuvieron por los acontecimientos que sorprendieron al país; la bancarrota primero y la guerra después. No fue si no hasta el gobierno de Piérola, donde empezó a recuperarce la economía nacional y se acentuó en el país el capitalismo moderno que se puso de manifiesto en la constitución de sociedades anónimas, nuevos bancos (Internacional, Italiano, Popular) compañías de seguros (Rímac, Internacional, Italia) y en la aparición de compañías dedicadas a negocios inmobiliarios. Fue así que en 1897, el Presidente Piérola (1895-1899) tuvo la genial idea de unir las ya abiertas avenidas Alfonso Ugarte y Alameda Grau, a través de un corte en los jardines de la Exposición. Este hecho suscito diversas controversias de las cuales da testimonio el entonces Alcalde General Dn. Juan Echenique (1890-1900) quien nos narra en sus memorias:

Todas las opiniones contrarias al acuerdo de cortar el parque de la exposición han cambiado ante las ventajas del hermoso paseo que hemos hecho y al que habéis dado por nombre la fecha gloriosa del gran día que sello para siempre la independencia Sud-Americana.

Y que al nacer el paseo hemos dado a lima algo que verdaderamente necesitaba lo prueba la misma afluencia de personas de todas las condiciones que a el acude desde el día de su inauguración.

En esta obra además no solo se ha satisfecho una necesidad si no que, puede decirse hemos dado a la ciudad el mas hermoso de sus edificios. El Palacio De La Exposición encerrado en el parque como antes estaba era simplemente una dependencia de estos; ocultando su belleza entre los árboles que lo rodeaban. Hoy dado su majestuoso frente al paseo, apreciándose en todos sus detalles, sus magníficos flancos y con acceso directo, es un monumento que puede enorgullecer a la capital.

(Memorias Del Alcalde Juan Echenique Lima-1900)

El Alcalde Echenique fue uno de los que se preocupó de embellecer el Paseo en sus inicios haciendo construir aceras con piedras de cambraycillo, empedrados de calzada con piedra corriente, canalización de las acequias con fierro, fuente de agua, grifos de agua contra incendio, etc. Con el transcurso del tiempo estas conformaciones estuvieron sujetas a constantes cambios; como la iluminación que en un principio fué a gas posteriormente fue eléctrica. Respecto a las bancas en sus inicios se habría colocado de mármol, pero al principio del XX se habrían optado por las de fierro y madera colocándose en este espacio un promedio de 235 de estos elementos, finalmente se llego a retirarlas y colocar nuevamente bancas de mármol.

El monumento a Cristóbal Colón que se hallaba inicialmente en la Plaza Colon (próximo a la Plaza Acho) Posteriormente se traslado frente al Parque Neptuno entre la avenida Grau y el actual Palacio de Justicia. Fue en 1901 que el Alcalde Elguera la hizo colocar delante del palacio de la exposición industrial, en el encuentro de la avenida Grau y 9 de diciembre este suceso motivo el cambio de la denominación de Av. 9 de Diciembre a Paseo Colón. La obra representa a Colon descubriendo América, personificada en la India que aparece a sus pies. Otros elementos que se encontraban en el paseo eran las estatuas conocidas como "las 4 estaciones" hechas en mármol y 12 leones de mármol de los cuales solo quedan dos, actualmente se encuentran custodiando el pórtico del Palacio de Justicia.

A raíz de la apertura del paseo, la burguesía limeña levanto nuevas casas en la que según Pedro Dávalos y Lisson; aquellos módulos no habían heredado nada de la antigua casa colonial .Estas edificaciones difieren por sus características arquitectónicas y pertenecen a diferentes etapas deacuerdo a la época en que fueron construidas. Las primeras fueron realizadas en el siglo XIX y comienzos del XX, las segundas realizadas por 1909 y las terceras realizadas sucesivamente entre 1918 y 1924 o posiblemente mas. Los arquitectos de aquellas primorosas joyas de la arquitectura limeña son Claudio Sahud y Emile Robert de origen francés, Ricardo Malachowsky de origen Polaco, Víctor Mora y Rafael Marquina de origen peruano.


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Otros de los edificios que honra al paseo con su presencia es el antiguo Instituto de Higiene que fuese encargado, por el presidente de Romaña, al entonces arquitecto frances Fernando Guillard para la participación del Peru en la Exposición de Paris de 1900.La obra fue hecha en Paris, se inspiro en el arte hispano-lusitano.El pabellón expuso piedras preciosas, lanas de alpaca, maderas de ebano, telas de algodón y lino, asi como plantas medicinales. Su construccion era desmontable, por lo que Pedro Paulet la hizo traer en marzo de 1904 para que funcionara como sede del Instituto Municipal de Higiene. Posteriormente el 24 de julio de 1944 se instala el Centro de Estudios Historicos Militares. Estas son las edificaciones que hasta hoy circundan el enigmatico paseo.

La concepción del Paseo difería de las antiguas calles coloniales, ahora la modernidad daba su valor agregado y la ciudad que se encontraba en un proceso de expansión, necesitaba calles mas amplias no solo para el transito de personas, sino también para la circulación de transporte moderno (tranvía, automóvil). Sus bermas centrales servían para que los pobladores lo usen como lugar de reposo y distracción que no tenían las vías tradicionales de Lima. Fue este valor agregado sumado a la presencia del Parque De La Exposición por lo que conformaron una unidad de recreación al que acudían de todos los lugares y de todas las condiciones; era un polo de atracción de masas por su belleza y su gran semejanza con el boulevard francés.

Muchos fueron los eventos y festejos del que fue testigo este Paseo, una de las tales fue la fiesta a la conmemoración al héroe nacional Francisco Bolognesi el 6 de noviembre de 1905. Este evento lo encontramos registrados de la siguiente manera en las páginas de los anales de aquella época:

La fiesta de la inauguración del monumento, que como hemos dicho termino en las ultimas horas de la tarde, no fue óbice para que en la noche se estableciera un verdadero corzo en el Paseo 9 de Diciembre.

Ofrecía la ciudad, en sus avenidas principalmente en las que conducen a aquel paseo, un golpe de vista soberbio. La mayor parte de los edificios levantados en ellos, además de la ornamentación mas o menos artística que lucieran durante el día, se hallaban profusamente iluminados con lámparas de gas o focos eléctricos de gran poder, que proyectaban luz clara e intensa. La estatua de Colon y la estación del tranvía eléctrico estaban primorosamente iluminados. La perspectiva que ofrecía el paseo no podía ser mas hermosa, alumbrado como estaba por ciento de miles de picos de gas y focos eléctricos, distribuidos con verdadero arte en toda su extensión. Jamás en Lima se había visto un paseo público adornado con tan exquisito primor.

Esa iluminación fue obra del ingeniero electricista señor Juan Armengol….

Revista PRISMA dic. 1905 Pág. 41

Este evento duró tres días y tuvo una afluencia extraordinaria de gente de todas las clases y condiciones sociales, algunos provenían del interior del país; lográndose congregar en el momento de la conmemoración, aproximadamente 50,000 personas. Igualmente en 1921 se registra un evento parecido pero no tan glamoroso como el ya mencionado; alusivo a la celebración del centenario de la independencia.

Este elegante paseo prolongo su mejor época hasta cerca de 1930 , Lima no era todavía una ciudad grande; no se veía casi migrantes andinos en sus calles, salvo en negocios de alimentos. Las fotos de la época muestran a los limeños con cuello y corbata, la mayoría con la olvidada "sarita", todos con sombrero .El Jirón de la Unión seguía siendo el lugar preferido de la élite para ir de compras. No había kioscos para adquirir periódicos, como ahora. Era necesario llamar al canillita del barrio y pedirle alguno de los que llamaríamos clásicos como :El Comercio (1839), La Prensa (1903-1984)., La Crónica, etc. Y si de diversiones hablamos la elite ya se había encargado de introducir los deportes como: las carreras de caballos (turf), tenis, cricket, fútbol, juegos atléticos, ciclismo y el cinema. Mientras los sectores populares preferían las actividades heredadas de la colonia, como las corridas de toros, peleas de gallos, los carnavales y otros mas recientes como el box ; estas ultimas actividades marginados por la elite por desatar libre expresión de emociones y el uso improductivo del ocio. Así mientras el poblador de Lima proseguía con sus costumbres habituales la ciudad se desdibujaba extendiéndose hacia la búsqueda de San Isidro y Miraflores.

El Paseo hasta el día de hoy se mantiene propiamente en su estructura física (ya que en su mayor proporción se conserva), el cambio ha sido mas bien de orden social, sus funciones de paseo han variado debido a las nuevas urbanizaciones que paulatinamente fueron surgiendo y que hizo aminorar la concurrencia debido a la lejanía y la creación de nuevos parques y avenidas .El excesivo aumento vehicular también trajo como consecuencia la urgente necesidad de crear nuevas vías adecuadas a tal fin y utilizar las existentes; de esta forma la situación del Paseo Colón se vio poco a poco convertida en una avenida de transito vehicular de carácter troncal. Viéndose necesario, al aumentar el transito vehicular, recortar las veredas de la alameda central del Paseo, quedando como es hoy una avenida ancha ( medio kilómetro de longitud y 40 metros de ancho) y con un jardín central con sus veredas.

Hoy el paseo no es mas lo que fue en sus mejores épocas, ya no escuchamos el barullo de grandes festejos, ahora el barullo es otro, el del tránsito. Sus palacetes no son mas anfitriones de suntuosas fiestas ahora solo se limitan a actividades comunes y sin trascendencia, sus edificios se encuentran descuidados otros parecen abandonados y otros ya no Existen. Si bien la remodelación del parque de la Exposición a producido un cambio favorable en la primera cuadra del paseo, este cambio no es de gran repercusión para la conservación de la salud del paseo, puesto que el ruido ensordecedor se mantiene, sumado al transito el cual han hecho de esta avenida "de paseo" en una avenida "de paso".


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